¿Sabes
esas personas que están siempre tristes?
¿O esas
que están siempre de subidón?
Qué
coñazo.
De la
tristeza siempre nace la inspiración.
Soy un
desastre emocional. Puede que simplemente un desastre. (la presentación de la página ya dice bastante sobre ello, paaaso)
Algunas
noches las dedico a ponerme música y dejarme llevar.
Escucho
listas que escuchaba con 15 años pero con la vuelta de los veintimil.
Pero
hay canciones a las que es muy difícil enfrentarse.
Te
dicen lo que no quieres escuchar y te hacen sentir miserable.
Me
declaro por momentos completamente nula en gestión de relaciones sociales.
Soy
demasiado yo. Demasiado caos.
Te
sientes irremediablemente libre cuando crees que lo has perdido todo.
Es una
sensación confusa e intensa por la que todo ser humano pasa alguna vez de su
existencia.
O si no…sorte.
Todos
somos la esencia de las cosas que han pasado por nuestra vida. Las que nos ha
gustado tanto vivir que añoramos fuerte, y las que nos han pateado hasta hacer
tambalear el suelo que pisamos.
Se
mezclan en un cóctel único.
Es
complicado a veces aquí dentro asimilar lo de ahí fuera.
Como
decía aquella canción, cada vez el mar es menos pacífico tras la tormenta.
Y si no
lo decía la canción, me lo invento, que es lo maravilloso de la adaptación
personal sobre las enseñanzas universales.
Puede
que todas esas veces que haya perdido el tiempo, haya aprendido en realidad
mucho..muchísimo; ya que puedes perderlo todo, todo excepto la inversión del
tiempo que has hecho.
Esa
inversión ,en forma de recuerdos, es ahora mi mochila . Aunque a veces la carga
pesa tanto que parecería imposible avanzar sin caer, siempre he preferido que
vaya llena.
Es así.
Te
rompen el corazón, pero no te enseñan a curarlo.
Te
dicen que todo pasa, que todo mejora, que todo saldrá bien.
Te
dicen que lo único que no tiene remedio en esta vida es la muerte.
Exacto.